Considera probar el baño turco del hotel, una experiencia auténtica y relajante que no te querrás perder.

Me sorprende que este hotel tenga una clasificación decente. La limpieza es cuestionable, las cucarachas en los baños son evidencia de un mantenimiento deficiente. Además, esperaba que me ofrecieran un gesto amable, como un upgrade o un regalo de bienvenida, pero solo recibí indiferencia. Estuve 6 noches y me llené de decepción, en especial por el Wifi lamentable.

La cama era muy cómoda y la habitación estaba bien conservada, lo que me permitió descansar después de un día ajetreado explorando la ciudad.

El aire acondicionado estaba deficiente y no lograba enfriar adecuadamente la habitación, lo que hizo que mi estancia fuera un poco incómoda por las noches.

- Ubicación excepcional
- Personal muy amable
- Desayuno variado

- Ruido nocturno
- Aire acondicionado deficiente
- Falta de mantenimiento

Proximidad a la Mezquita Azul, Terraza para desayunos, Habitaciones amplias y luminosas

La falta de mantenimiento en las habitaciones es inaceptable!!! ¡El aire acondicionado inconsistente puede arruinar tu estancia!!! El ruido de fondo de una máquina es molesto y el acceso a la colina puede ser complicado para algunos. ¡Es crucial mejorar estos aspectos!!!

Increíbles las hamburguesas en Vaha Cafe! Cada bocado era pura felicidad. disfruté la amabilidad del personal, en especial de Burgehan, que hizo de nuestra estancia algo especial. Y ¡vaya ubicación! Casi al lado de la Mezquita Azul y Santa Sofía, simplemente mágico.

Dejémoslo claro, la subida al hotel es una pequeña prueba de esfuerzo. Pero hasta eso tiene su encanto. Con todo lo demás brillando, este pequeño detalle se siente casi insignificante.

Grupo pequeño amigable

El desayuno era espectacular, una variedad de quesos y frutas. El personal fue muy amable, siempre dispuesto a ayudar y hasta nos dejaron imprimir cosas sin cobrar.

No fue barato, pero aún así aceptable.

buenas instalaciones pero pocos detalles de atención

La ubicación es perfecta, a un paso de sitios históricos. La atención del personal es cálida, destacando su amabilidad y disposición a ayudar en todo momento. Las habitaciones están bien equipadas y ofrecen una vista hermosa de la ciudad.

La falta de detalles en el trato al cliente algo decepcionante.

La habitación era acogedora, con buena limpieza y un desayuno variado, aunque había una cierta falta de atención en los detalles. La cercanía a la Mezquita Azul es inmejorable, pero debo mencionar que el ruido nocturno interrumpía un poco el descanso.

El wifi es bastante rápido. La limpieza no estuvo a la altura.

La ubicación es increíble, a pocos pasos de la Mezquita Azul. Además, el hotel cuenta con un baño turco que es una experiencia relajante y auténtica. Yo disfruté mucho de la terraza en la azotea, perfecta para unas vistas espectaculares.

me sentí como un vip, no me puedo quejar

La habitación era acogedora y la limpieza impecable. El desayuno fue un festín, con opciones variadas que reflejan la rica cultura gastronómica. Sin embargo, el ruido de máquinas a veces interrumpía mi descanso.